lunes, 4 de abril de 2011

I'm an agent of chaos.

No, la verdad que no va más esto. Yo te llego a encontrar por la calle, y te lleno la cabeza de plomo. No sé cómo mierda lo voy a hacer, pero te juro que te voy a matar. No podés ser tan basura. Lo que hiciste no tiene perdón. Me rompiste. Me rompiste, y hacía mucho que nadie lo hacía. En verdad, hacía mucho que no me sentía así, tan lleno de ira, tan lleno de rencor, de furia. Soy una llama andante, vos pasás por al lado mío y sentís el calor que emano, te lo juro. Esta faceta de mi no es muy amigable como la de siempre, no. Es totalmente distinta al Poste que todos conocen. No, Poste no, a Agustín. Esta faceta es todo lo contraria a mí. Es mi otra parte. Esta faceta no quiere salir, pero cuando lo hace, no te conviene ni un poco estar cerca mío. Soy capaz de volarte la cabeza de una piña, o con lo que tenga a mano. Asi que ya me escuchaste, la reputísima madre que te pario, yo te llego a encontrar por la calle, y te vuelo la cabeza. Agarro el palo que tengo abajo de la cama, y te la vuelo. Sos de lo peor, lo que hiciste no tiene perdón. Basura, infeliz, mi ira no tiene contención, no tiene descanso, no se puede parar. Me arrancaste esa parte de mí que era importantísima. Ya no está, se fue, y no va a volver. Es una realidad. Ojalá vivas por cien años más, zombie enfermo y retorcido que no tiene noción de la vida.

Mi mente colapsó. Esta mañana estaba bien pese a las noticias que recibí (que ya las tenía bien asumidas desde antes, o sea, no me afectaron). Pero esto... no tiene nombre.

No hay comentarios: